miércoles, 28 de marzo de 2012


LO QUE FALTABA EN COLOMBIA: TRAFICAR SERES HUMANOS


¿Sabía usted que hoy el negocio de compra y ventas de seres humanos es más generalizado, abundante e incluso más lucrativo que cuando la esclavitud era legal hace varios siglos?

En países como Camboya, Rumania, India, Paquistán y una decena de otros en África, bebés y menores son vendidos.  Al convertirse en la “propiedad” de sus dueños, estos pueden hacer lo que se les da la gana con su nueva adquisición.
Muchos menores son convertidos en esclavos y puestos a trabajar en prostíbulos, minas, ladrilleras, industrias informales… Otros son descuartizados y terminan ofrecidos en el boyante mercado y tráfico internacional de órganos.
Lo que ustedes vieron en ‘Séptimo Día’ este domingo es la prueba más tangible, hasta ahora, de que ese tipo de tráfico ahora existe en Colombia y por eso pertenecemos a la lista negra de países traficantes de seres humanos.
Es posible que algunos de los bebés vendidos en este país podrían tener un fin digno en manos de nuevos “padres“. Pero pregunto:  ¿Por qué comprar el bebé cuando se puede adoptar uno legalmente?
Los traficantes que conocieron en el programa seguramente quedarán impunes a pesar de la gravedad del delito. ¿Por qué? Porque el sistema judicial en este país esta diseñado para minimizar castigos en busca de la “descongestión” del mismo sistema.
Es por eso que tenemos los colombianos que convivir al lado de hampones, asesinos, violadores, ladrones y, ahora, traficantes que están libres y absolutamente capaces de convertirnos en su próxima víctima.

Esto sucede porque legisladores y nuestros líderes determinaron que así debe funcionar nuestro sistema judicial, donde abusar de todos los permisos, rebajas, beneficios y atenuantes es tremendamente fácil.
Estos traficantes estarán operando su clínica en Funza en menos de un año. Se los apuesto.  Griten compatriotas: ¡No hay derecho!

1 comentario: